Derivado de las denuncias penales que interpuso el nuevo Gobierno de San Luis Potosí en contra de exfuncionarios del sector Salud, por el desvío de recursos y daño al erario público, Ricardo Gallardo Cardona, Gobernador del Estado, confirmó la devolución de 30 millones de pesos a las finanzas estatales como parte de la justicia real que caracteriza a esta administración.

El jefe del Ejecutivo dijo que hasta este jueves, por la mañana, se habían confirmado 16 millones en la cuentas bancarias gubernamentales; la cifra habría llegado a los 30 millones de pesos en el transcurso del día. Añadió que el regreso del “dinero robado” reafirma la existencia de la herencia maldita que legaron a las y a los potosinos el exgobernador y exfuncionarios estatales, con un daño específico al sistema de Salud en toda la Entidad.

Comentó que la próxima semana, la población tendrá recuperados más de 50 millones de pesos, mismos que serán inmediatamente destinados a las carencias y prioridades de los Servicios de Salud en el Estado, entre ellos un proyecto para la adquisición de 50 ambulancias que serían distribuidas en las cuatro zonas, para que las familias tengan más servicios hospitalarios, principalmente en los municipios con más necesidades. Así como las condiciones salariales y prestaciones laborales de todo el personal de salud del sistema público.

Gallardo Cardona añadió que los montos devueltos al Estado, hoy, representan un cambio trascendental en la historia política de San Luis Potosí, puesto que ningún otro gobierno ha logrado recuperar los recursos financieros mal usados: “los metían a la cárcel, pero por jurisprudencia salían a los dos o tres meses y nunca regresaban nada; no queremos gente en prisión, sólo que regresen lo que se llevaron”. Dijo que los resultados son parte del trabajo hecho por la Fiscalía General del Estado.

Lamentó que las y los exdirectivos de la Secretaría de Salud en el sexenio anterior hayan aprovechado la contingencia de Covid-19 para enriquecerse y no para combatir la enfermedad que cobró la vida de miles de personas en la Entidad. “La maldita herencia no es un discurso ni una presunción, es una realidad y nos estamos dando cuenta de su existencia, tristemente, con la devolución del dinero”, finalizó.

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