México es un país con riqueza en activos físicos y financieros; si bien su monto representa 18.3 por ciento de la abundancia neta de Estados Unidos, es 40 por ciento mayor a la de Canadá, aun cuando 36.6 por ciento de la población se encuentre en situación de pobreza, expuso Miguel del Castillo Negrete Rovira, jefe de la Unidad de Desarrollo Social de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), sede Subregional en nuestro país.

Al presentar el informe “La distribución del ingreso y la riqueza en México y países seleccionados”, en el auditorio “Jesús Silva-Herzog” del Posgrado de la Facultad de Economía de la UNAM, indicó: está mal repartida en la nación mexicana, pues el uno por ciento posee 41.2 por ciento.

En los activos financieros la concentración es mayor: uno por ciento registra 87.9 por ciento de la opulencia financiera, existe a la par una pobreza de patrimonio ya que 64.2 por ciento de los hogares tiene menos del 50 por ciento de la media de riqueza neta detalló.

Subrayó que únicamente 0.1 por ciento de las familias goza de 22.3 por ciento de la riqueza neta (activos físicos, más activos financieros y menos pasivos financieros).

Convocado por el Seminario Universitario de la Cuestión Social (SUCS) del Programa Universitario de Estudios del Desarrollo (PUED) de la UNAM, el funcionario del organismo internacional aseguró que la riqueza neta total ha aumentado a ritmo mayor que el ingreso nacional. “La raíz de la desigualdad es debido a una sesgada distribución del valor generado en las empresas”.

Expuso que en México 19.7 millones de personas recibieron tres billones de pesos en remuneraciones de las empresas privadas; es decir, solo 12.9 mil pesos mensuales en promedio. En contraste, 1.1 millones de familias obtuvieron 3.7 billones de pesos en dividendos, lo que significa 280 mil pesos mensuales en promedio.

Mejoría

Ante Enrique Provencio Durazo, coordinador del PUED; Rolando Cordera Campos, fundador de dicho programa y coordinador del SUCS; de Mario Luis Fuentes Alcalá, secretario técnico del SUCS; y de Curtis Huffman, investigador del PUED; Miguel del Castillo mencionó que aunado a que la distribución es “escandalosa”, 72.9 por ciento de la recaudación tributaria la aportan los hogares “cuando debería ser la empresa la que contribuyera más”.

En 2021 el gobierno recibió 1.1 billones de pesos por Impuesto al Valor Agregado y se pagaron 1.9 millones por Impuesto Sobre la Renta.

Aunque continúa una profunda desigualdad, dijo, podemos ver algunas señales de mejoría. “Del 2018 al 2024, el salario mínimo ha aumentado 88.6 por ciento (por arriba de la inflación), cerca del valor que tenía en 1985. El salario base de cotización del IMSS de 21.9 millones de trabajadores formales ha crecido 20.8 por ciento en términos reales, de diciembre de 2018 a junio del 2023”.

Agregó que en 2021 nuestro país ocupó el décimo quinto lugar en tamaño del producto interno bruto (United Nations Data 2021), y el décimo en población con 126.7 millones de individuos.

En ese mismo año, tenía una riqueza neta per cápita de 78.6 mil dólares, equivalente a 90 por ciento del Reino Unido, 49 por ciento de Estados Unidos y 46 por ciento de Italia.

Si bien la riqueza de los hogares tuvo importante disminución en el periodo 2003-2008, creció 5.9 por ciento en 2009; durante la emergencia sanitaria aumentó 5.1 por ciento, mientras que el ingreso se redujo 6.8 por ciento. En 2021 se estimó alza real en la percepción nacional del sector hogares de 6.6 por ciento.

Además, según datos recabados por la CEPAL, casi dos terceras partes de los hogares más pobres recibieron transferencias del gobierno.