Con la Luna llena como testigo de una noche fría y con cielo despejado donde miles de personas disfrutaron la maravilla del cosmos y múltiples conceptos de divulgación para acercarse a la ciencia, la 15 edición de La Noche de las Estrellas resultó una fiesta de asombro al observar por el telescopio, escuchar música, así como a entusiastas científicos hablar con pasión y conocimiento de su trabajo académico.

Los espectadores recorrieron Las Islas de Ciudad Universitaria (CU), sede principal de la cita astronómica de divulgación más importante de Iberoamérica, donde se instalaron 200 telescopios a lo largo del emblemático jardín del campus central, los cuales se compartieron con los visitantes pacientemente formados para ser asistidos en la observación de la Luna, Júpiter, Saturno y Orión.

El coordinador general del evento, José Franco López, informó que se contó con 114 sedes en el país, cinco de ellas en Guerrero y una en Acapulco, puerto que a pesar de la reconstrucción tuvo espacio para la divulgación científica.

Durante la inauguración en CU, el director del Instituto de Astronomía (IA) de la UNAM, Jesús González González, subrayó que se trata de un evento nacional donde colaboran la Universidad Nacional, el Instituto Politécnico Nacional (IPN), la Agencia Espacial Mexicana (AEM); la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México; la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (SECTEI) de la Ciudad de México; y la empresa Celestron/Victorinox, entre otras organizaciones.

Destacó que aproximadamente 500 voluntarios intervinieron en las diversas actividades programadas en 42 carpas temáticas y tres planetarios donde hubo talleres, conferencias y experimentos; música, teatro y danza que complementaron la jornada de ciencia y arte unidos en un festejo de creatividad e imaginación.

Salvador Landeros Ayala, director general de la AEM, dijo que el espacio es inspiración, innovación, es cuidar nuestro planeta y descubrir los misterios del Universo.

Reiteró que en el próximo regreso a la Luna la tripulante será una mujer, lo cual es un estímulo para que niñas y jóvenes se decidan por estudiar una carrera espacial.

Mujeres en el espacio

En la conferencia magistral, Franco López, también investigador del IA, manifestó que en 60 años han viajado al espacio 79 mujeres, la mayoría provenientes de la extinta Unión Soviética (URSS), Estados Unidos y Rusia.

En un recuento histórico citó que la primera fue la cosmonauta soviética Valentina Tereshkova, ingeniera aeronáutica quien a sus 26 años estuvo tres días rodeando la Tierra a bordo de la nave Vostok 6, que voló al espacio en 1963. “Ni siquiera el famoso Yuri Gagarin consiguió su hazaña, pues él estuvo rodeando la Tierra un solo día”.

En tanto, la primera estadounidense en llegar al espacio lo hizo 20 años después, en 1983. Fue Sally Ride, quien a sus 32 años viajó a bordo del taxi espacial Challenger.

Aunque con los años han aumentado las nacionalidades de las visitantes, hasta ahora solamente una es de origen mexicano: la estadounidense Ellen Ochoa, quien viajó en el taxi espacial Discovery, en 1993, apuntó.

Más adelante, Franco López mencionó que en la siguiente misión a la Luna se llevará a una mujer; mientras que el próximo telescopio de la NASA se llamará Nancy Roman, en honor a la madre del Hubble. “Este instrumento estudiará la estructura cósmica y la materia oscura y estará listo en 2027”.

En cuanto a destacadas astrónomas en México subrayó la importancia de Paris Pismis, académica del IA y científica de origen turco que hizo carrera en nuestro país al ser la primera astrónoma profesional. Se casó con el mexicano Félix Recillas, también investigador de la UNAM.

Asimismo, la científica polaca Ruth Gall, investigadora del Instituto de Geofísica y doctora honoris causa por la UNAM, referente en el estudio de rayos cósmicos. Además, resaltó a la universitaria Silvia Torres Castilleja, actual investigadora del Instituto de Astronomía de la UNAM, quien fue presidenta de la Unión Astronómica Internacional.