Robustecer el trabajo colaborativo y la comunicación entre los integrantes del Instituto de Ciencias Nucleares (ICN) de la UNAM, mantener y mejorar aún más la excelencia académica, lograr la contratación de nuevas plazas para investigadores de nivel internacional, y realizar ciencia útil, es decir, vinculada a la resolución de problemas emergentes del país y del mundo, son parte de los objetivos del director de esa entidad académica, Alfred Barry U’Ren Cortés.

Al delinear su plan de trabajo para los siguientes cuatro años, el físico y doctor en óptica dijo que un primer ejercicio será efectuar un autodiagnóstico de cómo está el ICN, en el cual participe la comunidad para analizar retos y oportunidades.

Se pretende elaborar un plan estratégico u “hoja de ruta” y un nuevo reglamento, pues el vigente data de 1998 y desde entonces el Instituto ha tenido cambios profundos, aseveró en entrevista.

U´Ren Cortés destacó que la excelencia académica es la característica clave que ha llevado al ICN a ser una dependencia prestigiada y consolidada.

En ese sentido, planteó un procedimiento riguroso e imparcial para la contratación de nuevos investigadores, a través de convocatorias internacionales que se mantengan abiertas un tiempo suficiente para asegurar un número considerable de aspirantes.

Se tomará en cuenta el alto nivel académico y la perspectiva de género de acuerdo con los lineamientos de la Coordinación para la Igualdad de Género de la UNAM, pues debemos estar abiertos a contar con más mujeres en nuestra planta académica, afirmó.

También tiene la meta de contar con más investigadores eméritos, lo que significa doble beneficio: cada emeritazgo honra una trayectoria académica sobresaliente, y lleva a la creación de una nueva plaza de investigación para un joven académico.

Crear sinergias

La ciencia en el ICN se divide en tres categorías: ciencia básica fundamental (que es la base del quehacer científico del Instituto); ciencia de grandes colaboraciones asociadas a instalaciones experimentales de gran escala (como el CERN, HAWC, Auger y JEM-EUSO); y ciencia aplicada, que además de artículos y tesis pueden producir patentes, desarrollos tecnológicos y trabajos con empresas privadas.

El experto propuso crear una agrupación transversal de ciencia aplicada, reuniendo a investigadores con vocación para hacer ciencia con impacto en la sociedad. La idea es crear sinergias entre las y los científicos, así como facilitar la utilización de recursos destinados a consolidar la ciencia aplicada, detalló U´Ren Cortés.

De acuerdo con el universitario, es crucial mantener firme apoyo a la ciencia básica fundamental y a la de grandes contribuciones, ambas con amplia trayectoria en el Instituto.

“Pretendo promover la formación de meta-grupos compuestos por diversos equipos de investigación del ICN y de otras dependencias, enfocados en abordar temas relacionados directamente con grandes problemas nacionales, como la adaptación al cambio climático o la inteligencia artificial”, enfatizó.

El nuevo director considera que la transparencia en las decisiones del Instituto genera certidumbre y tranquilidad. Por ello, promueve la discusión abierta de cualquier tema relevante dentro del consejo interno, para que todos participen.

Además, fomentará la equidad de género, se aplicarán encuestas con el propósito de identificar “focos rojos”, las cuales serán útiles para elaborar diagnósticos y se propiciará la convivencia interna de la comunidad.

Otro de sus planes es organizar un congreso interno anual en el que cada participante presente su trabajo de investigación, a fin de fomentar las interrelaciones académicas.

También se evaluarán las condiciones de trabajo de los técnicos académicos para apoyar sus carreras profesionales, mejorar los espacios físicos para estudiantes y participar en más posgrados, en los que la comunidad académica del ICN ya realiza tutorías.

Para fortalecer el contacto con la sociedad más allá del ámbito académico, U’Ren Cortés tiene previsto que la Unidad de Comunicación de la Ciencia desarrolle un proyecto para difundir aún más al exterior de la Universidad la ciencia que se realiza en el Instituto, uno de los más productivos del Subsistema de la Investigación Científica de la UNAM.

Además, reestructurará la Secretaría de Vinculación para fortalecer los nexos con los sectores gubernamental, de salud, educativo y empresarial. “En otros países existe un ecosistema que propicia interacciones frecuentes y significativas entre esos sectores y el académico. Debemos dar pasos sólidos hacia este tipo de interacción, aún poco común en México”, finalizó.