• Con las obras entregadas en la Colonia Los Reyitos, la actual administración municipal supera ya lo realizado en los tres años de la anterior gestión

Con la pavimentación con concreto hidráulico de la calle Ónix y la rehabilitación de la calle Madrigal, en Los Reyitos, así como la recuperación de un espacio abandonado al que se le daba un uso totalmente ajeno a sus funciones, fueron obras que se entregaron a la ciudad para llegar a un total de más de 440 que ha realizado en 25 meses de ejercicio esta administración municipal.

Con esa cifra se supera el número de trabajos realizados en tres años del gobierno anterior, pero además con menos gasto, porque ahora se da un manejo transparente y honesto a los recursos públicos.

En el acto de entrega de los trabajos, con una inversión total de 3 millones 285 mil pesos, el alcalde Alfredo Lujambio Cataño, aseguró que en las acciones del Gobierno Municipal participan desde sus inicios más de 130 empresas constructoras, optando por las que ofrecen mejores condiciones de calidad y precio.

“La reparación total de la calle Ónix dará a la colonia una mejor fisonomía y transmitirá fuerza a la gente que vive ahí porque lo merece, además de que servirá de motivación para esforzarse y alcanzar una mejor calidad de vida”, expresó el mandatario municipal.

Señaló que la explanada que estaba en casi abandono total también deja de ser un espacio al que se le daba una ocupación con fines muy distintos a los suyos, no había bancas o estaban destruidas, privaba la indolencia en la poca vegetación que había, su cancha de basquetbol era todo menos eso, y hasta una parte se destinaba a estacionamiento de vehículos con beneficios para algún particular.

Eso se acabó, -dijo el alcalde Lujambio, porque las direcciones de Obras Públicas, de Servicios Municipales y de Desarrollo Social, a cargo de Marco Antonio Uribe Ávila, José Luis Zamora Valero y de Oscar Valle Portilla, respectivamente, “unieron sus fuerzas y talentos para darle dignidad a ese espacio en ruinas y convertirlo en un sitio de esparcimiento que marcará en forma contundente el antes y el después de su apariencia”.

Remarcó el alcalde que la vegetación cambió en forma radical, se pusieron palmas y otras plantas, se podaron árboles, y que la cancha de basquetbol ahora sí lo es de verdad porque está en condiciones óptimas de uso, puesto que el piso se arregló, igual que los tableros, y la señalización está completa.

“Además, con recursos que sobraron gracias a una buena gestión, alcanzó para pavimentar un área que estaba deshecha, dejándola en condiciones inmejorables para que se use como espacio de recreación y convivencia de los vecinos que lo podrán disfrutar con toda seguridad”, añadió el primer edil.

Eso sí, pidió Lujambio Cataño la colaboración de los vecinos para que cuiden lo que se acaba de arreglar para disfrute de ellos, “porque no hay mejor forma de responderle a la ciudadanía que poniendo a su alcance mejoras para superar las condiciones de vida”, concluyó.