• En embarazadas la dieta debe adaptarse a las nuevas necesidades de fortalecer la salud del binomio mamá-bebe.
  • Antes de embarazarse, es fundamental eliminar tóxicos de su organismo, como el tabaco y el alcohol, para evitar malformaciones en el feto y futuras patologías durante el crecimiento.

Los Servicios de Salud, a través del Hospital del Niño y la Mujer, emite recomendaciones para fortalecer el organismo de la mujer embarazada y de su bebé, entre las que destaca consumir ácido fólico, calcio, hierro, consumir alimentos saludables diariamente, así como productos que contengan proteínas y estar bien hidratada.

La dependencia explicó que el consumo del ácido fólico ayuda a prevenir algunas malformaciones en las niñas y niños, es difícil obtener la cantidad necesaria en los alimentos por lo que el médico deberá indicar la dosis adecuada. Si es posible, iniciar uno a dos meses antes de embarazarse.

Durante el embarazo la cantidad de sangre en el cuerpo aumenta, por lo que el consumo del hierro es importante para el crecimiento y desarrollo cerebral del bebé, este se puede encontrar en los alimentos como: espinacas, acelgas y brócoli, además de tomarlo en tabletas.

El calcio durante el embarazo puede reducir el riesgo de enfermedades graves como el aumento de la presión en la sangre. Es importante mencionar que también ayuda en la formación de los huesos y futuros dientes de los bebés.

También se debe tomar en cuenta el consumo de proteínas, que se encuentran en los frijoles, guisantes, huevo, carnes, nueces y semillas sin sal. Toda mujer embarazada debe estar bien hidratada, por lo que se recomienda tomar 2 litros de agua al día.

Es importante mencionar que en el embarazo se debe evitar el consumo de alcohol, ya que puede causar alteraciones en el crecimiento y desarrollo de la o el niño; también existen productos que pueden tener gérmenes que causen enfermedades transmitidas por alimentos, incluyendo productos que se preparan en la calle por ejemplo, los productos del mar que estén mal refrigerados como pescado, atún; incluso también los quesos o derivados de la leche sin procesar.

Para mayor información se recomienda acudir a la Unidad de Atención Médica más cercana.