En el marco de la conmemoración de los 30 años del Restablecimiento de las Relaciones Diplomáticas entre México y la Santa Sede, el canciller Marcelo Ebrard Casaubon y el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, inauguraron el encuentro académico: “Laicidad abierta y libertad religiosa, una visión contemporánea”.

Durante su intervención, el secretario Ebrard se pronunció sobre la relación con la Santa Sede, “nos unen cada vez más causas muy profundas y muy queridas para todos nosotros, yo diría identitarias, respecto a la dignidad humana; nos une el respeto profundo a la libertad, libertad de creencias, libertad política, libertad personal”.

“Veo en el ámbito internacional una acción cada vez mayor de la Santa Sede y de México en favor de la paz en un mundo difícil, incierto, conflictivo que tenemos por delante”. “Buen momento para valorar esta cercanía y esta identidad común”, remarcó.

El canciller Ebrard aseguró que ambos países coinciden “en la búsqueda de la paz y en las acciones concretas para reducir el tráfico de armas, la producción de armas, la proliferación de armas en todo el globo”.

Así como en “el profundo respeto a la dignidad humana y a sus libertades; el compromiso con la persona, con su integridad; la causa común de acabar con la pobreza tan pronto sea posible”, dijo.

En el mismo sentido, el cardenal Parolin reiteró  que ambos países “comparten los mismos valores, valores de paz, de fraternidad, de justicia social y respeto de los derechos humanos, en vista de alcanzar el mismo objetivo, es decir el bien común del pueblo mexicano”.

Por otro lado, el secretario Ebrard agradeció el apoyo del cardenal Parolin “para garantizar el acceso universal a vacunas, a medicamentos, a tratamientos en el seno de la Organización de las Naciones Unidas y de otras instituciones multilaterales”. “Ha sido muy relevante la participación de la Santa Sede, que tiene un peso específico […] en el ámbito internacional”, destacó.

Asimismo, expresó su agradecimiento por el apoyo de la estructura de la Iglesia católica mexicana y del arzobispo Aguilar Retes “que nos respaldó y nos ha respaldado a la sociedad mexicana durante la pandemia”.

Finalmente, se llevó a cabo la firma de una carta de intención para promover el Códice Cruz-Badiano, documento de la medicina herbolaria antigua que estuvo en custodia de la Santa Sede durante más de un siglo y que fue devuelto a México en 1992. El Códice Badiano es considerado como el texto más antiguo de medicina escrito en América.

El secretario Ebrard se refirió al códice como “uno de los textos más importantes para la historia de México porque recoge […] los conocimientos médicos de la civilización azteca”.

Además, agradeció que  “con motivo de la exposición que se organizó en México por los 200 años de la independencia nacional, la Santa Sede también contribuyó para que pudiéramos organizar la exposición denominada “La grandeza de México.”

La inauguración y la firma de la carta de intención se realizaron en el Palacio de la Escuela de Medicina y contó con la presencia del cardenal Carlos Aguilar Retes, arzobispo primado de México; S.E. Mons. Rogelio Cabrera López, arzobispo de Monterrey; y Germán Enrique Fajardo, director de la Facultad de Medicina de la UNAM.