La tecnología es estimulante desde el punto de vista intelectual y puede tener un profundo impacto en la transformación de las condiciones de vida de la sociedad, afirmó el secretario General de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, al inaugurar la XXXI Edición del Concurso Universitario “Feria de las Ciencias, la Tecnología y la Innovación”.

A partir de 1991, recordó, la Universidad ha llevado a cabo este encuentro que es, sin duda, una de las iniciativas más afortunadas que se han emprendido para conjuntar el impulso a las vocaciones científicas, y concientizar a los estudiantes de bachillerato sobre la importancia de la innovación tecnológica. Se trata de una de las actividades emblemáticas de esta casa de estudios.

Lomelí Vanegas mencionó que ese espacio donde se encuentran los jóvenes de los distintos sistemas del bachillerato, también es de convivencia entre los académicos, y resulta estimulante por las distintas áreas del conocimiento y la innovación tecnológica en las cuales se encuentra estructurado el concurso.

La Feria -que se realiza hoy y mañana sábado 29, en el Centro de Exposiciones y Congresos UNAM, en Ciudad Universitaria- es una experiencia que marcará a los estudiantes participantes. “La aportación de los docentes dejará huella en sus vocaciones y futuro profesional”, comentó.

Este encuentro permite fortalecer la vida académica de la Universidad, su esencia misma, y es un espacio privilegiado para mostrar cómo se complementan las tres funciones de nuestra institución: docencia, investigación y la difusión y extensión de la cultura y el conocimiento, enfatizó.

Al hacer uso de la palabra, el coordinador de Vinculación y Transferencia Tecnológica, Jorge Vázquez Ramos, dejó en claro que “inventar es crear algo que no existía, pero innovar implica que a partir de productos, servicios o conceptos conocidos se hagan mejoras o nuevos usos”.

Sugirió a los jóvenes tomar en serio a la ciencia, sumergirse en ella y comprenderla, “para que la transformen en productos que pueden ser benéficos para la sociedad. Qué bueno que están en este concurso, que varios van a ganar y que varios de ustedes se van a dedicar a la ciencia. Háganlo con vocación y mejoren el destino de la sociedad; ese es su compromiso”.

A su vez, la directora general de Incorporación y Revalidación de Estudios, Manola Giral Lozano, recalcó que la Feria es un ejemplo de trabajo en equipo, de cómo la Universidad colabora a partir de distintos ángulos para apoyar a los alumnos. Ustedes se atrevieron a salir de su zona de confort; dedicaron mucho de su tiempo a leer, sintetizar ideas, buscar datos que los apoyen y diseñar un proyecto que pueda defenderlos.

Hoy, dijo, la Universidad está de gala y ustedes son los invitados más importantes, donde expondrán sus proyectos ante mentes con más experiencia y manejo del conocimiento de cada una de las áreas. Para algunos esta será una vivencia del bachillerato y, para otros, el primer gafete de un evento científico al que acuden.

“Queremos estudiantes preparados en ciencias, con buenas bases, para poder innovar, crear, y seguir profundizando en el conocimiento; ustedes son una muestra de ello”.

En su oportunidad, el director general de la Escuela Nacional Colegio de Ciencias y Humanidades, Benjamín Barajas Sánchez, señaló que este concurso es un testimonio de trabajo colaborativo del bachillerato con diversas entidades de la UNAM y otras escuelas del nivel medio superior metropolitano. Su tarea ha sido ejemplar y probada en el tiempo, pues lleva más de 30 años de existencia y supera la participación de 25 mil alumnos, cinco mil profesores y más de 800 proyectos de investigación presentados.

En esta nueva edición, primera después de la pandemia, los alumnos participan en diferentes áreas del conocimiento: biología, ciencias de la salud, ciencias ambientales, química, física, matemáticas y robótica, en las modalidades de diseño innovador, desarrollo tecnológico, así como investigación de campo, documental o experimental, detalló.

Los jóvenes han sido asesorados por profesores comprometidos con la formación de sus estudiantes. “A ellos les expresamos nuestra gratitud, así como al trabajo del jurado calificador que seleccionó los mejores proyectos”.

María Dolores Valle Martínez, directora general de la Escuela Nacional Preparatoria, manifestó que la Feria promueve el encuentro juvenil con la ciencia y la tecnología, la creatividad, el ingenio y la innovación, así como el compromiso, la ética y la responsabilidad para fortalecer la formación integral de los estudiantes.

Sentimos una gran admiración y respeto por su participación. Si bien recibir la distinción de una medalla o una mención honorífica es el mejor escenario, es importante que “valoren el significado de encontrarse hoy entre los finalistas, pues implica que han realizado un trabajo destacado”.

Esta edición del concurso reunió a más de mil 200 alumnos del mencionado nivel de estudios y un total de mil 519 participantes, incluidos asesores, jurados y comité organizador. “Es un espacio caracterizado desde sus orígenes por el impulso a las vocaciones científicas y tecnológicas”, aseveró Valle Martínez.

Al acto asistieron también Alma Angélica Martínez Pérez, coordinadora del Consejo Académico del Bachillerato; Leonor Pinelo Baqueriza, fundadora del Concurso; Miguel Serrano Vizuet, coordinador general del Concurso; y Elaine Reynoso Haynes, en representación del director general de Divulgación de la Ciencia, César Augusto Domínguez Pérez-Tejada.